Ciudad de México, 30 de octubre (SinEmbargo).- Para la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Alicia Bárcena Ibarra, es imprescindible abordar el tema de la desigualdad con un cambio estructural, productivo y de fondo que genere innovación tecnología y empleos con derechos: “es importante mirar uno de los graves problemas que tenemos en la región que es la desigualdad, no somos la región más pobre del mundo pero sí la más desigual”.
Añadió que como nunca antes, este 2014 se han realizado muchas revisiones de cifras de crecimiento y que se estima que para América Latina sea tan sólo de 1.3 por ciento.
Durante su participación en el Encuentro Empresarial 2014 de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Bárcenas indicó que la crisis de 2008 pasó de ser un suceso coyuntural a un problema estructural y que es un punto de inflexión donde la continuidad del modelo se ha fracturado, pone en duda al mercado autorregulado y, por lo tanto, se requiere una nueva visión que logre un mayor equilibrio entre el Estado, el mercado y la sociedad.
“Se tiene que pasar de una cultura de privilegios a una cultura de la igualdad (…) la distribución de las ganancias de productividad en las que durante siglos ha sido desigual la renta del capital y la masa salarial; hoy en el mundo, el uno por ciento concentra la mayor parte de la información, que no invierte casi nada y obtiene casi todo de nosotros, los que realmente invierten están sufriendo una gran de dificultades y en consecuencia, también los trabajadores”, señaló.
De acuerdo con Bárcena, las pequeñas y medianas empresas generan en la actualidad 60 por ciento de los empleos, el resto corre por parte de las grandes compañías.
LAS ESTIMACIONES PARA 2015
Señaló que durante la última década, 60 millones de personas han salido de la pobreza y que pueden convertirse en un motor de crecimiento, “obviamente, se requiere de una macroeconomía que ayude a mitigar la volatilidad, fomente productividad y que haya un cierre de brechas tecnológicas internas y externas, que es uno de los graves problemas que estamos enfrentando”.
Añadió que el tema de la educación está entre los principales en la agenda de los países, pero el verdadero problema es saber cómo se puede absorber el progreso técnico.
Dijo que se tiene estimado un crecimiento del 2 por ciento para Estados Unidos, lo calificó de “mediocre” pero que para México y Centroamérica será positivo por el tema de las remesas y el retorno de una mejor dinámica comercial. Por otra parte, señaló, “el ajuste en Europa, que ha sido duro en lo fiscal y en su estructura, provocó una caída en la competitividad, en el desempleo y recesión, ya que actualmente, la economía de los países de Europa representa el 31 por ciento de la importación a nivel mundial y tiene el 19 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial; por eso es que preocupa tanto porque el impacto llega hasta Asia y Pacífico también”.
Durante el primer trimestre de 2015 se prevé el retiro de la expansión monetaria, explicó que se inyectaron 80 mil millones de dólares al mes y hoy, se encuentra en los niveles más bajos.
Menciono la entrada en recesión de la economía europea, “este año lo iniciamos con la idea de que Europa crecería, 1 por ciento, después 0. 5 por ciento y ahora sus países entran y salen de la recesión”.
En el caso de China, que en años anteriores mostraba dos dígitos de crecimiento, ahora se encuentra en 7. 3 por ciento y se prevé que no rebase esa estimación, pero, lo que resalta es que hoy es la primera economía del mundo, rebasando a la de Estados Unidos.
LA CAÍDA DE LAS EXPORTACIONES
“El comercio es el tema más delicado en la economía mundial, hay una desaceleración muy grande de las exportaciones en volumen, y en el precio, peor (…) las exportaciones del mundo han caído”, señaló Bárcena. “En la movida de las exportaciones se miden dos periodos, de 2000 a 2008 y de 2010 a 2013, en el primer periodo las exportaciones mundiales eran de 12.4 y cayeron a 5.8 y lo más preocupante es que se da en los productos primarios, cayeron del 17.4 a 4.9 por ciento, una caída muy profunda”.
Comentó que se tiene un consenso en que se debe aumentar la productividad, pasar al mundo de la innovación con mucho más fuerza y con empleos de calidad. “Se habla de que en nuestra región hay fragmentación, pero más bien hay espacios que deben llenarse. Tenemos restricciones externas con el comercio, los precios, la volatilidad financiera y cuestiones que se definen por los ciclos de Estados Unidos. El nivel de exportaciones en América Latina era de 23.5 por ciento, para 2014, se prevé que sea de 0.8 por ciento”.
Finalizó con un llamado a utilizar los ejes estratégicos para la integración regional: “Tenemos un mercado de 60 millones de personas (…) el mercado regional juega un rol clave y es más propicio para la diversificación, es el más importante para las manufacturas y empresas, pero se requiere política industrial moderna”.